María, título de canciones, películas, refranes y mujeres históricas… inclusive, es el nombre que lleva una de mis personas favoritas en este mundo, mi mejor amiga.
A mediados del mes de septiembre, este nombre se apoderó de los medios de mi país, esta isla bendita llamada Puerto Rico. Las razones no fueron ninguna de las antes mencionadas, sino por un Huracán que amenazaba con su ingrata visita. Es entonces cuando María pasó de ser un posible “remix” de Ricky Martin, a escribirse en nuestra historia, como un evento que cambiaría por completo el Puerto Rico que conocíamos.
El miércoles 20 de septiembre del 2017 vivimos un evento atmosférico que posiblemente, ninguna de las generaciones vivas había experimentado. Se trataba de un Huracán categoría 4 que venía a pasear por la isla, y lo hizo… DES-PA-CITO.
Para no abrumarlos con la tragedia, voy a ser breve. El 21 de septiembre despertamos en un país donde las hojas verdes había desaparecido… ningún semáforo quedó en su sitio y junto a la vegetación, se fueron TODAS las comunicaciones, el agua y como es de conocimiento mundial… la energía eléctrica. En un periodo de 24 horas, fuimos de primavera a otoño y en progreso dimos para atrás 100 años. Mi esposo y yo tardamos dos días en llegar a casa de sus padres, días largos en contactar otros familiares y amigos… no había transito para muchos lugares y el único medio que nos podía mantener informados eran las escasas dos emisoras de radio que lograron sobrevivir. No había televisor ya que muchos canales se quedaron sin sus antenas, otros se inundaron… mucho menos contar con el Internet.
Fueron días duros. Nadie se puede imaginar la impotencia que vivimos los que trabajamos con tecnología ante esta situación. Tardé algunas semanas en contactar a mis clientes, quienes gracias a Dios estaban bien y no dudaron de mi trabajo ante la emergencia, lo cual tengo que agradecerles de corazón.
¡Ahora venía el reto! ¿Cómo continuar con un negocio que depende del Internet y las comunicaciones? No se imaginan mi frustración, muchos días lloré de tristeza, coraje, impotencia… tanto sacrificio por los pasados 4 años para construir un negocio que ahora se tambaleaba como esos semáforos que quedaron colgando de un hilo. A esto le sumaba el hecho de que día tras día veía como colegas se marchaban del país en miras de mantener sus negocios corriendo. En mi caso, mi esposo tiene su profesión, tenemos casa, carro y un hijo, esa alternativa (aunque ideal) no era tan fácil para mi, por lo que no me quedó de otra que aceptar el reto.
¿Qué hice? Tomar las cosas día a día. Es como levantarse todos los días en Navidad, ¿qué sorpresa habrá? Luego de una semana identifiqué un lugar en mi vecindario donde había Internet (a veces), allí logré contactar a mis clientes y continuar manejando sus redes ante la emergencia. Luego nos ayudaron algunos vecinos a la limpieza de la casa, logramos conseguir frutas otro día, cocinar una buena cena con los vecinos y jugar dominó… así hasta que por fin llegó el Internet al teléfono móvil y eventualmente la luz, el agua y el WIFI. Lo único que me falta es conseguir el pino de navidad y decorarlo.
Han sido momentos difíciles pero cuando no se pierde la FE, todo fluye. Se vale estar triste, se vale llorar, desesperarse pero que no sean sentimientos que dominen tu vida.
El propósito de compartirles la historia es para que sepan en lo que andaba, para que analices que la situación difícil que estas viviendo VA A MEJORAR y que a pesar de sentirnos abrumados, tristes y desanimados, no puedes perder la Fe y para esto siempre es bueno rodearte de personas que te brinden apoyo.
A 54 días del evento, ya cuento con buena señal para ir retomando la rutina poco a poco y seguir compartiéndoles la valiosa información que se merecen.
Gracias a todos los que me han escrito con mensajes de solidaridad y apoyo. Aunque estemos… más o menos bien, todavía nuestra isla necesita mucha ayuda. Si están interesados en enviar artículos de primera necesidad, puedes escribirme a info@natandra.tv para darle los detalles.
Una vez más, gracias por visitar mi página, por leerme y por ayudarme a mantener vivo mi sueño de continuar con este negocio. ¡Puerto Rico Se Levanta!
Me encanto tu reportaje!! Sé que vas hacia delante!! Eres luchadora!! Y emprendedora!! Que Dios te siga colmando de bendiciones para ti y tu hermosa familia!! 💕🌺
que bueno volver a recibir noticias tuyas. éxitos Nataly.
saludos desde Lima, Perú
Las dificultades que a veces se presentan en nuestra vida, son las que nos sostienen y nos hacen ser mejores en todos los sentido… Te abrazo a la distancia y te acompaño en este camino que vas transitando, nada es para siempre…
Hace tiempo que te sigo, y lo seguiré haciendo…
Namaste
Me alegra que a pesar de las adversidades su país
se esté reconstruyendo, mi solidaridad para con ustedes y que Dios los acompañe en este duro camino.
Querida Natalia
Has resumido en este escrito, el sentir de muchos. La impotencia y frustración nos a tocado a todos. Como bien mencionas tenemos que día a día seguir a delante y con mucha fe y fortaleza levantarnos y ahora con más ánimo.
Mucho éxito , que talento te sobra. Un abrazo 🤗 ❤️❤️👏🏻👏🏻👏🏻❤️❤️🙏🏻🙏🏻🙏🏻